La belleza, para mí, es algo fascinante; me atraen los detalles y las sutilezas, ya sea un toque de barroco, un destello de minimalismo o un punto de romanticismo francés. Sin embargo, soy de los que creen que cada estilo tiene su lugar, y no me gusta mezclarlo todo. Me gusta lo artesanal, el DIY, y pasar horas navegando en internet buscando esa "vibra" que encaje con mi día.
Me encanta comprar flores a mi chica, hacer surf al amanecer y terminar el domingo con una copa de vino tinto. No me gustan los desórdenes, ni un centímetro fuera de lugar. Soy muy meticuloso con mis espacios: el baño tiene que estar en su orden perfecto y la puerta nunca debe estar cerrada. Tampoco soporto la confusión de un asiento de inodoro abierto.
Esas pequeñas cosas que hacen la diferencia en el día a día. Pero también tengo mi lado relajado. Me encanta caminar por la playa con gafas de sol un domingo por la mañana, acompañado de mi chica Jasmine, y disfrutar de un aperitivo con amigos en una terraza, aprovechando el momento para hacer algo de terapia entre risas. Hablar en inglés con desconocidos es otro de esos placeres simples que disfruto, y por encima de todo, me gusta ser mimado, consentido y rodeado de cariño. Cada detalle de mi vida tiene su propósito, y lo que busco es encontrar el equilibrio perfecto entre estética, diversión y armonía.